Hay quienes piensan que el dinero lo es todo, por eso se rebajan a cualquier cosa por hacerse ricos.
El peor enemigo que puedes llegar a tener eres tú mismo.
En esta vida, el dinero no es importante cuando hay salud y amor.
Hay que saber tratar con los problemas si deseas ser feliz, porque siempre habrá alguno que te persiga.
Reflexiona todo el tiempo que necesites, pero actúa todo lo rápido que puedas.
Es más fácil hacer daño a una persona amada, que a una temida.
Aprender sin pensar es como sumar sin números.
Si quieres ser rico, no te enfoques en ganar dinero, sino en disminuir tu avaricia.
Una persona digna prefiere vivir un segundo de pie, a arrastrarse toda la vida de rodillas.